Tapachula, Chiapas, 9 de Noviembre del 2021.- La caravana de migrantes que avanza por el sur de México decidió cambiar su ruta, por lo que ahora se encamina hacia Estados Unidos en lugar de ir a la capital mexicana, indicó un activista y líder del grupo el pasado lunes.
El director de la organización Pueblo Sin Fronteras, Irineo Mujica, anunció lo anterior, y dijo en un video que en diez días intentará organizar otra caravana de miles de migrantes que llegará al estado de Veracruz, en la costa del Golfo de México, para unirse al grupo que viene caminando por el estado de Oaxaca. Ahora no vamos a la Ciudad de México. Ahora vamos a la frontera norte, vamos a Sonora”, dijo Mujica.
El cambio en los planes llega después de que él denunciara que el grupo ha sido perseguido y acosado por funcionarios del gobierno mexicano. Las relaciones entre el gobierno y la caravana se deterioraron luego de que un grupo de migrantes agredió el jueves con palos y piedras a oficiales de la Guardia Nacional e hirió a cinco elementos de ese cuerpo.
Las autoridades locales negaron que se opusieran a recibirles y finalmente el grupo se instaló en un parque del pueblo. Sin embargo, la hondureña Tatiana Antillana, que viaja con su esposo y dos pequeños de 4 y 2 años de edad, comentó que cuando llegaron había varios negocios que estaban abiertos pero empezaron a cerrar sus puertas de repente Queríamos comprar comida pero ya no pudimos», lamentó, aunque reconoció que luego una señora les regaló algunos alimentos.
El grupo de migrantes, que cada vez es de menor tamaño pero todavía supera el millar de personas y sigue teniendo muchos niños, está cada vez más desgastado después de 17 días de camino desde que el 23 de octubre salieron de Tapachula, 280 kilómetros al sur, casi en la frontera con Guatemala. Las familias necesitan comprar comida y muchos niños también deben ser atendidos por deshidratación, dijo Mújica.
En redes sociales hubo mensajes que alentaban a la población a no permitir el ingreso de la caravana a Chahuites por la violencia que algunos protagonizaron el jueves en la localidad de Pijijiapan al enfrentarse con la Guardia Nacional. El Instituto Nacional de Migración (INM) no ha hablado de casos de covid-19 en la caravana, pero sí dijo que se habían dado varios de dengue, algunos graves. Ha atacado duramente a los activistas que acompañan la caravana, diciendo que están poniendo en riesgo a población vulnerable al alentarla a seguir en el grupo y no aceptar las propuestas oficiales.
Según sus datos, quedarían unas 1,300 personas en el contingente. En su momento más concurrido, la caravana llegó a sumar unas 4,000 personas, según constató la AP.